De
acuerdo con las estimaciones de la Internet World Stats (http://www.internetworldstats.com/stats.htm),
en el 2005 se superó la barrera de los mil millones de usuarios de Internet en
el mundo y a inicios del 2011 se superó la de los dos mil millones.
Al 31
marzo del 2011 la población mundial ascendía a 6,930’055,154 habitantes y el
número de usuarios de Internet llegaba a los 2,095’006,005. Como porcentaje de
la población mundial, el 30.2% de los habitantes del globo usaban Internet, lo
que representa un crecimiento de casi cinco veces con relación al número de
usuarios que existía al 2000.
La
región donde la penetración de Internet es mayor, como era de esperar, es
Estados Unidos con 78.3%, seguido por Oceanía y Europa, con 60.1% y 58.3%,
respectivamente. Con 36.2%, América Latina y el Caribe se sitúan 6 puntos por
encima del promedio mundial, pero representando su población apenas el 8.4% de
la población del planeta; en términos absolutos los internautas
latinoamericanos representan solo el 10.1% del total mundial. En términos de
penetración, siguen Medio Oriente y Asia y, cerrando el grupo, con un enorme
retraso, África (11.4%), cuya situación sería aún más dramática si se descuenta
a Sudáfrica.
Es
interesante observar qué idiomas se usan en Internet. Tomando en cuenta los 10
idiomas más importantes en la red, el inglés tiene la tasa de penetración por
lenguaje más alta con 43.4%, seguido por el español con 39.9% y el chino con
37.2%. Aunque el español supera la tasa de crecimiento de la de China, dada la
desigual distribución de la población en el mundo, cuando se observa el número
de usuarios como porcentaje de la población mundial los usuarios del inglés
retroceden al 26.8%, los chinos representan el 24.2% y los hispanoparlantes el
7.8%. Si se considerara a los bilingües, la cantidad de angloparlantes debería
ser mayor. Por otra parte, los latinos constituyen la primera minoría étnica en
Estados Unidos y esto incrementa notablemente el peso del español en las redes.
El peso
demográfico de A. Latina coloca al español en el tercer lugar en el mundo, por
encima del japonés (4.7%), el portugués, alemán, árabe, francés, ruso y
coreano, cuyo peso oscila entre 2% y el 3.9%. Una crítica que se le hacía a la
red de redes hace algunos años apuntaba a que esta era un lago cultural
angloparlante, donde los usuarios de otras tradiciones culturales y
lingüísticas eran una minoría irrelevante. Eso ha cambiado: Internet ha dejado
de ser la red angloparlante que fue en sus inicios y quienes hablan inglés hoy
representan apenas una cuarta parte.
De acuerdo con la misma fuente, al 30 de junio del 2011 la población estimada del Perú ascendía a 29’248,943 habitantes y los usuarios de Internet eran 9’157,800, lo que representaba una penetración, como porcentaje de la población, de 31.3%. Esto nos pone un punto por encima del promedio mundial pero 5 puntos por debajo del promedio de América Latina y el Caribe. Si nos comparamos solo con América del Sur, la distancia es aún mayor, pues la tasa de penetración en la región está en el 40.7%.
Esto
representa un cambio significativo con relación a las tendencias existentes
hasta hace pocos años, cuando el Perú figuraba entre los países con mayor tasa
de crecimiento de la región. En la primera mitad de la década pasada el
crecimiento del número de usuarios se basó fundamentalmente en la proliferación
de las Cabinas Internet, lo que nos colocó en una posición expectante, pero
ahora lo determinante es el acceso de banda ancha desde los hogares. Son varios
los estudios que muestran que el obstáculo fundamental para que esta se difunda
es el elevado costo del servicio, y las tarifas del Perú están entre las más
caras de la región.
Es necesario pues abrir el servicio a una efectiva competencia para abaratar el acceso y, lo más importante, definir desde el Estado una agenda de inclusión digital, como parte del proyecto de desarrollo nacional. Tan importante como fue el ferrocarril en una época, hoy lo es la infraestructura digital, y es mucho lo que está en juego en su construcción, a todo nivel.
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